En la vida uno compra muchas cosas que a veces son útiles, pero otras veces compramos otras que no lo son. Hay cosas necesarias y otras superfluas, sin embargo, casi siempre las adquirimos porque son bonitas, pero no necesarias.
Me doy cuenta que hay artÃculos grandes y costosos que no nos dieron ninguna función o utilidad, sin embargo, hay otros que son pequeños, baratos, pero muy funcionales.
Justamente ayer por la tarde, tomé en mis manos un pequeño recipiente de plástico, el cual compré en un pueblito en Inglaterra, por unos cuantos peniques. Lo compré porque es un suvenir que dice London, pero su función es sostener la bolsita de té que ya ha sido usada. Después eso se vierte en los desechos de la cocina. Sin embargo, ese platito plástico en forma de taza, es sumamente útil para mÃ, lo uso todas las tardes, cuando me siento junto a mi esposo a disfrutar un té caliente, alguna galletita y sobre todo su compañÃa.
En la medida que van transcurriendo los años, siento que me voy volviendo más sencilla en cuanto a mantener solamente lo necesario y despojarme de lo que no lo es. Creo que vamos entendiendo que los adornos y los lujos son de alguna manera, generadores de más trabajo, tal como limpiar o mantener dichos artÃculos. Lo mismo nos ocurre con la ropa y los zapatos. Alguna vez, después de muchos meses de no usar una cartera o un par de zapatos de piel, queriendo usarlos, me he encontrado con que están llenos de moho u hongos, por falta de uso.
Algo que he aprendido es que, si durante seis meses no usé algo, es porque realmente no lo necesito. Si en algún momento futuro llegara a necesitarlo, seguramente podrÃa rentarlo, pedirlo prestado, o reemplazarlo por algo más.
Ustedes no se imaginan cuán agradecida estoy por tener ese platito de melamina, tan modesto, tan sencillo, tan pequeño, tan barato, pero tan útil.
Es posible que entre tus cosas cuentes con algún artÃculo asÃ, de esos que tú dices, lo necesito cada dÃa, lo aprecio mucho. PodrÃa ser una tijera, una pinza, una pluma, un vaso o taza, sea lo que sea, cuÃdalo.
Pero te insto a que aprendas a ser más sencillo cada dÃa y a mantenerte más liviano cada vez, te facilitará la vida y el paso por esta tierra.